¿Disfrutar o extrañar a Luis Suárez?

La marcha de Luis Suárez al Barcelona sigue pasando factura al Liverpool, que no ha logrado la manera de suplir los tantos del charrúa, en una temporada en la que el equipo red no está cumpliendo las expectativas generadas.

Decimosegundo en la Premier League, a 14 puntos del Chelsea, y todavía sin asegurar su pase a octavos de final de la Champions League, el conjunto inglés no ha conseguido volver a plasmar sobre el césped el juego que le llevó a ser subcampeón de la liga el curso pasado.

El técnico del equipo, Brendan Rodgers, aprovechó los más de 80 millones de euros que dejó el traspaso de Suárez para reforzar su ataque con tres futbolistas de diversos perfiles: el italiano Mario Balotelli, el inglés Rickie Lambert y el joven belga Divock Origi, cedido actualmente al Lille.

Se esperaba mucho de Súper Mario, quien volvía al fútbol inglés después de su discreto paso por el Milán, y si bien volvió a acaparar titulares, no ha sido desde el punto de vista deportivo. Tres meses después de su arribo, sólo convirtió dos veces con su nuevo equipo: una en la Copa de la Liga y otra en la Liga de Campeones. En la Premier, después de siete partidos, se le sigue resistiendo el gol.

Otro de las contrataciones llamadas a suplir a Suárez es el internacional inglés Rickie Lambert, un veterano que ha pasado por todas las divisiones del fútbol inglés, y que ahora, a sus 32 años, llega a su club favorito. Lambert, quien anotó 117 goles en sus cuatro temporadas en el Southampton, se enfundó el 9 del Liverpool después de que el conjunto red pagara 4 millones de euros por sus servicios.

Su primer tanto con su nuevo club tardó en llegar tres meses, en la derrota del pasado fin de semana ante el Crystal Palace en Londres, pero ya se ha estrenado en Champions, cuando marcó este miércoles el gol del 1-1 en Sofía, frente a Ludogorets.

A la falta de gol de Balotelli y Lambert hay que sumarle la mala fortuna del también italiano Fabio Borini, quien no ha logrado hacerse un hueco en el once ideal de Rodgers desde su traspaso procedente del Swansea, en julio de 2012, y las continuas lesiones que azotan a Daniel Sturridge, teórico titular. El inglés, el socio de Luis Suárez la pasada temporada, encadena lesión con lesión este año, en el que solo ha podido jugar tres partidos, anotando un gol.

El panorama actual del Liverpool hace que haya varias voces que pidan el regreso del belga Divock Origi, fichado al Lille por 10 millones de euros pero cedido hasta final de temporada en el club francés. El joven delantero de 19 años, autor de tres goles en 11 partidos en la liga francesa esta temporada, podría, pese a las reticencias de Rodgers a su regreso, ser la solución a los problemas en ataque del Liverpool esta temporada.

Del otro lado

En la otra vereda, Barcelona celebra el primer tanto del charrúa con su camiseta, que llegó en la Champions a un mes de su debut. A partir de ahí todo han sido flores para el uruguayo, quien a juzgar por Marca es “el verdadero 9” culé.

El diario español resaltó en un reciente artículo que la efectividad del salteño mejora cuando se convierte en “referencia del ataque”, y es ahí cuando “todo su trabajo y desgaste” tienen sentido. Todo eso se reflejó a partir del tanto anotado ante APOEL.

“El delantero demostró en esa posición que es puro peligro y pudo anotar varios goles más. Tuvo hasta cuatro ocasiones claras que no fructificaron por diferentes motivos. Urko Pardo le paró dos disparos en la primera parte, un disparo cruzado que salió desviado y un centro de Alba al área pequeña que le impidieron rematar de cabeza por poco en la segunda parte. Y eso que solo jugó 76 minutos”, resalta la nota.

“Suárez llega en plena forma y perfectamente acoplado”, concluye, dejando en claro que las sensaciones en el anterior club del uruguayo y en el actual son bien diferentes.

EFE | Montevideo Portal