Recomendaciones para asistir con tu perro a los espacios verdes que habilitó la IM

A partir del 2 febrero pasado, la Intendencia de Montevideo habilitó 20 espacios verdes y dos playas para que los perros puedan estar sueltos; Montevideo Portal conversó con el veterinario Pablo Sehabiaga para conocer su opinión como especialista y recopilar algunas de sus recomendaciones.

La medida es "un paso a favor", consideró Sehabiaga. "Es una de los pasos a seguir después de la reglamentación del uso de collar y correa. De esta forma, la Intendencia abrió la cancha", agregó.

En este sentido, el especialista dijo que "celebra la iniciativa" porque hace que la gente esté "informada sobre que 'ahí hay perros sueltos' y que puedan irse a otro lado y porque puede evitar algún accidente y demás".

Recomendaciones

Desde la comuna capitalina se enumeraron algunas recomendaciones que deberían tener en cuenta los dueños de los perros al momento de asistir a alguno de los espacios habilitados; Sehabiaga hace hincapié en algunas y agrega otras.

Por un lado, entiende que "lo ideal sería que cada dueño se asesorara con un veterinario", en relación a la posibilidad de que el perro pueda ir o no a uno de los mencionados espacios.

"Por ejemplo, perras en celo no estaría bueno que salgan y queden sueltas porque después es un problema para todos los otros perros. Y lo mismo en el caso de perros con alguna enfermedad infecto-contagiosa", apuntó.

Por otra parte, el especialista considera que "lo básico es que realmente los perros estén contenidos y que la gente se haga cargo de la materia fecal de los perros".

Otra recomendación tiene que ver con una actitud proactiva por parte de los dueños. "Si se sabe que un perro es agresivo, obviamente hay que hablarlo entre las personas y evitar problemas. Hay ciertos lenguajes corporales en los perros que nos pueden hacer entender si son amistosos o pretenden algún tipo de conflicto. Y los dueños de los perros saben cómo es su perro. Por lo tanto, hay que tener precauciones en base a eso", explicó.

Así, Sehabiaga recomienda el diálogo entre los dueños: "El dueño tiene que explorar el terreno y ver las posibilidades: quizás hay un horario en el que hay tipos de perros con los que mi perro se lleva mal y otros en los que no".

Sumar para enriquecer

Aunque el especialista cree que la medida de habilitar estos espacios "es un punto de partida", estima que ahora es momento de que "construyamos juntos a partir de esto".

En este sentido, Sehabiaga señala algunos aspectos que podrían reverse o sumarse a lo dispuesto por la Intendencia.

"Lo que supe y me parece que está bueno es que la Intendencia no está cerrada a decir 'estos son los lugares y manejense', sino que a medida que avance el incremento de la utilización de los espacios creo que van a poder ser modificables o estarán abiertos recomendaciones", señaló.

Así, debería reverse que "hay algunos que no tienen sombra o que el acceso es más complicado porque a las personas les quedan lejos".

Por otro lado, señala que "en algunos lugares se plantea una especie de división entre perros pequeños y perros grandes. Por lo que si hay algún problema, por lo menos, los perros quedan más parejos".

Por otra parte, el "asesoramiento" en el lugar también sería de mucha ayuda. "En Buenos Aires hay una especie de contenedores donde se brinda agua o algún tipo de primer auxilio", explica.

Otro tema tiene que ver con la ubicación de estos lugares. "Debería reverse dónde están ubicados los lugares. Por ejemplo en Villa Biarritz, que es una zona cargadísima de perros, la gente no se va hasta Trouville", que es el lugar más cercano que habilitó la IM.

En la misma línea de cosas a sumar, el veterinario cree que sería interesante revisar un sistema que funciona en base a correas de diferentes colores.

"En ese sistema, por ejemplo, el rojo significa 'mi perro no es amistoso con otros perros'; amarillo, 'a mi perro no le gustan los niños'; verde, 'está todo bien con todos'. Y esa es otra forma de comunicarnos", explicó.

Cambio cultural

Por otra parte, Sehabiaga cree que está ocurriendo un cambio cultural en la sociedad en relación a la convivencia con los perros en espacios públicos.

"El hecho de que los perros tengan collar y correa hace que a la gente que no le gustan los perros, les gusten un poco más. Porque de última, lo ven controlado", estimó.

En este sentido, apunta que el cambio cultural "está pasando". "Creo que está habiendo un cambio cultural. Casi no he visto más perros sueltos. Y todos los dueños con bolsitas", estimó.

"Si el perro está haciendo material fecal y vos no tenés bolsita, y alguien te ve, realmente te sentís observado. Y antes era diferente. Ahora te sentís como un infractor", reflexionó Sehabiaga en diálogo con Montevideo Portal.

Recomendaciones de la IM

- Evitar asistir cuando la perra esté en celo.

- Evitar asistir cuando el animal tenga alguna lastimadura o parte del cuerpo infectado.

- Separar a los perros por dimensiones, evitando coincidir mascotas pequeñas con otros con grandes dimensiones.

- A los paseadores: no distraerse, ya que al asistir numerosos perros, se suelen suscitar escaramuzas.